
EVOCACIÓN A MI PUEBLO
Hoy extraño la campiña
de mi querido terruño
y se me sale del puño
aquel recuerdo de niña.
La enredadera de viña
para hacer vino en la casa,
abuela haciendo una masa
de empanaditas de queso
y el perro lamiendo un hueso
mirando a todo el que pasa.
Mi abuelo con su alboroto
entrenando un gallo fino
para labrarle el camino
de verle hasta el pico roto.
Un guajiro pasa en moto
levantando un polverío;
otros van camino al río
donde aparcan sus caballos
para ver saltar los gallos
en desenfrenado lío.
¡Qué pueblo el pueblito mío
con sus casas de rendijas!,
tablas con sus tejas fijas,
hoy taciturno y sombrío.
Cuando lo recuerdo, río
evocando mi niñez;
quizás yo vuelva, y tal vez
con un bastón en la mano
salga a recorrer temprano
el polvo de mi vejez.
Hoy extraño la campiña
de mi querido terruño
y se me sale del puño
aquel recuerdo de niña.
La enredadera de viña
para hacer vino en la casa,
abuela haciendo una masa
de empanaditas de queso
y el perro lamiendo un hueso
mirando a todo el que pasa.
Mi abuelo con su alboroto
entrenando un gallo fino
para labrarle el camino
de verle hasta el pico roto.
Un guajiro pasa en moto
levantando un polverío;
otros van camino al río
donde aparcan sus caballos
para ver saltar los gallos
en desenfrenado lío.
¡Qué pueblo el pueblito mío
con sus casas de rendijas!,
tablas con sus tejas fijas,
hoy taciturno y sombrío.
Cuando lo recuerdo, río
evocando mi niñez;
quizás yo vuelva, y tal vez
con un bastón en la mano
salga a recorrer temprano
el polvo de mi vejez.